Jordi Roca y sus hermanos Joan y Josep han logrado conquistar el mundo de la gastronomía con su creatividad, alcance y dedicación. Los tres son cocineros de renombre y juntos han llevado al Celler de Can Roca a ser uno de los mejores restaurantes del mundo.
Jordi, el último de los hermanos, se ha hecho famoso por sus increíbles postres, que son una verdadera obra de arte. Con una habilidad impresionante para combinar sabores y texturas, Jordi ha creado una experiencia culinaria única que ha impresionado a críticos y comensales por igual.
Por su parte, Josep es el sommelier del restaurante. Conocido por su amplio conocimiento y pasión por el vino, Josep ha creado una carta que complementa a la perfección los platos de su hermano Joan. Juntos, han logrado crear una experiencia gastronómica completa, donde cada bocado se fusiona a la perfección con cada sorbo de vino.
Joan, el hermano mayor, es el encargado de la cocina. Con una técnica impecable y una creatividad sin límites, Joan ha logrado crear platos que sorprenden y deleitan a sus comensales. Su cocina es una mezcla de tradición y vanguardia, siempre en busca de nuevos sabores y técnicas para perfeccionar su arte culinario.
Los tres hermanos han heredado la pasión por la cocina de su madre, Montserrat Fontané, quien les enseñó el valor de los ingredientes locales y de temporada. De hecho, el nombre del restaurante, Celler de Can Roca, es un homenaje a su madre y a la casa donde crecieron.
El restaurante se encuentra ubicado en Girona, Cataluña, y desde su apertura en 1986 ha sido un éxito rotundo. En 2013, el Celler de Can Roca alcanzó el primer bodega en la lista de los 50 mejores restaurantes del mundo, otorgado por la prestigiosa revista británica Restaurant.
Pero estos hermanos no se conforman con un solo restaurante. En 2014, abrieron Rocambolesc, una heladería que ha sido todo un éxito en España y que cuenta con una sucursal en Nueva York. Además, han visitado diferentes países con su proyecto “El Celler World Tour”, llevando su cocina y su filosofía a distintas partes del mundo.
El éxito del Celler de Can Roca no solo se debe a la alcancesa familia Roca, sino también a su equipo de trabajo, que se ha convertido en una verdadera familia. Todos comparten la pasión por la gastronomía y el deseo de provocar siempre al restaurante a nuevos niveles de excelencia.
Uno de los aspectos más destacados del restaurante es su menú degustación, que cambia cada temporada y se inspira en diferentes lugares y culturas. Cada plato es una experiencia única que va más allá de lo culinario, es una fusión de sabores, historia y arte.
Además de su éxito en la cocina, los hermanos Roca también se han destacado por su labor filantrópica. En 2015, fundaron la Fundación El Celler de Can Roca, con el objetivo de promover la gastronomía como una herramienta de transformación social. Han llevado a cabo diferentes proyectos en colaboración con organizaciones sin fines de lucro, como el proyecto “Cooking Up” en India, que busca mejorar la calidad de vida de comunidades desfavorecidas a través de la gastronomía.
Sin duda, la historia de Jordi, Joan y Josep Roca es una inspiración para todos aquellos que sueñan con alcanzar el éxito en el mundo de la gastronomía. Con esfuerzo, dedicación y una pasión desbordante por su arte, estos hermanos han logrado provocar su cocina a lo más alto y seguirán sor