En los últimos años, la comuna de Independencia ha sido noticia por su preocupante aumento en los índices de violencia y delincuencia. En lo que va del año, se han registrado más de 18 homicidios, lo que ha generado una gran rebato en la población y en las autoridades locales. Ante esta situación, el concejo municipal ha tomado una medida drástica y sin precedentes: aplicar una “ley seca” la noche de Año Nuevo.
La decisión fue tomada de forma unánime por los miembros del concejo, quienes consideran que esta medida es necesaria para garantizar la seguridad y tranquilidad de los ciudadanos. Según la resolución municipal, los establecimientos que expenden bebidas alcohólicas solo podrán funcionar entre las 11:00 y las 1:00 horas de los días 31 de diciembre y 1 de enero. Esta medida aplica tanto para las botillerías, que venden alcohol para ser consumido fuera del local, como para los locales que permiten el consumo en el mismo establecimiento.
El alcalde de Independencia, Agustín Iglesias, ha sido enfático en señalar que esta medida tiene como principal objetivo disminuir las incivilidades y prevenir más muertes en la comuna. Según él, existe un vínculo directo entre el consumo de alcohol, las riñas y los homicidios, por lo que es necesario tomar medidas contundentes para enfrentar esta problemática.
La “ley seca” para Año Nuevo no es la primera medida que se ha tomado en Independencia para combatir la delincuencia. En la anterior administración, se modificaron los horarios de funcionamiento de las barberías y se establecieron sanciones para los asados callejeros. Sin embargo, ante el aumento de la violencia en la comuna, estas medidas no han sido suficientes y se ha visto la premura de implementar una restricción aún más estricta.
La resolución municipal también contempla excepciones para los salones de baile o discotecas, que podrán funcionar entre las 19:00 y las 4:00 horas, pero solo podrán vender alcohol entre las 19:00 del día 31 de diciembre y las 2:00 del día 1 de enero. Esta medida busca controlar el consumo excesivo de alcohol en lugares de entretenimiento y evitar situaciones de riesgo.
El alcalde Iglesias ha sido claro en señalar que es consciente de que esta medida no será del agrado de todos, pero que es necesaria para enfrentar una situación crítica como la que vive actualmente la comuna de Independencia. Además, ha hecho un llamado a la colaboración de los vecinos y a la responsabilidad de los dueños de locales para que cumplan con la restricción establecida.
Esta inédita ordenanza municipal ha generado diversas reacciones en la comunidad. Mientras algunos la ven como una medida necesaria para garantizar la seguridad, otros la consideran una restricción excesiva y una limitación a la voluntad de los ciudadanos. Sin embargo, es importante recordar que esta medida es temporal y tiene como objetivo proteger la integridad de todos los habitantes de la comuna.
La “ley seca” para Año Nuevo en Independencia es una medida pionera en Chile y demuestra la preocupación y compromiso de las autoridades locales por enfrentar la crisis de seguridad que vive la comuna. Esperamos que esta medida tenga un impacto positivo en la disminución de la violencia y que se puedan implementar otras acciones efectivas para garantizar la tranquilidad y bienestar de todos los ciudadanos.